16/VIII/2010
Un cielo de agujas blancas
es la punta del iceberg.
Bajo la vista.
El esqueleto gótico
silencioso, soberbio, sumario,
se desparrama sobre una colina
resuelto en mil aristas pétreas.
Entro.
Un boato de luz temprana
empapa mis pasos.
Hay estrellas de mediodía
que acarician péndulos de aire
entre lóbulos, nervios,
y extienden sus vértices
cuajados de frío
hasta rozar
el eco de los inciensos.
Hay espacios triangulares,
una claridad estática y caliza
que traspasa
muros, alientos y siglos.
Es la presunción de lo ingrávido
impregnada de tiempo.
oh como me gusta! historia del arte inserta en poesía! :)
RispondiEliminaHummmm, las estrellas en el interior, mola; como las torres y ese aire gótico...
RispondiEliminaQué casualidad. Hoy he estado de turismo en Burgos. Muy bonita la ciudad. Y también he estado en el museo de la evolución humana, está muy bien.
RispondiEliminaBesos :)
"Es la presunción de lo ingrávido/ impregnada de tiempo", dices, poeta. Me encanta.Tiempo y piedra, ingrávida solidez. Muy bunos versos finales.
RispondiEliminaMuy buenos versos. La poesía es creo que tiene un valor añadido cuando parte de una realidad física que todos podemos presenciar.
RispondiEliminaMe gusta la poesía descriptiva...
Salud
There's a certain slant of light,
RispondiEliminaOn winter afternoons,
That oppresses, like the weight
Of cathedral tunes.
Emily Dickinson
;)
:***